Vivir sin el cuento es como

Este cuento surgió durante mi participación en el evento "Maraton Rio das mil e uma historias" 17 de Marzo de 2019  en el marco del día de los contadores de historias. en Rio de Janeiro en el que por primera vez contaba historias en Brasil, una experiencia maravillosas que me muestra lo hermoso y grande que es la narración oral en Brasil, también la participación de muchas mujeres narradoras y la bonita hermandad que existe entre el gremio de los contadores de historias este donde este. 

María cuentos una joven que a corta edad manejaba muy bien su libertad e individualidad, ella poseía múltiples habilidades y virtudes que la hacían única en su alrededor, un día decidió salir de viajar muy lejos de su casa. Contar historias, era una de sus pasiones, compartir a través de la palabra muchas historias que a los oídos de los que la escuchan se vuelven realidad, llevaba un hermoso mensaje a todas las personas que la escucharan y para ella era como gotas constantes de felicidad que llenan su corazón. Para ella el arte de contar historias sentía que era lo único que real mente le pertenecía y que nadie le puede arrebatar es la capacidad de crear y contar cuentos a través de sus labios.

Como todos y como nadie, en donde ella vivía todas personas querían alardear de sus títulos profesionales de sus grandes carreras laborales y sus cosas materiales. A maría cuento en cambio le apasionaba contar historias cada cuento estaba arraigado a su ser y a su memoria ancestral.

Sabia que tanto su carrera profesional como su pasión por contar historias eran incompatibles, tan insolubles como el agua y el aceite. Un día una persona le dijo tu no puedes trabajar como una contadora de historias y a la vez ser científica. María cuento escucho muy atenta aquellas palabras, en sus ojos dejaba ver lo que sentía en su corazón y en su mente, tenía que tomar una decisión. Y dejo atrás su pasión de contar historias.

Los días de María cuento comenzaron a tornarse distintos, las persona ahora solo la llamaban María, ella inicio su trabajo en una gran institución realizando investigaciones como una científica y en el fondo era infeliz, había negado una parte de su ser y de aquello que solo a ella pertenecía. Y un día decidió contarles a todos sus amigos que ella era una gran artista y contadora de historias, todos se acercaron y le pidieron que contara una historia, al escuchar la primera todos quedaron maravillados y querían escuchar más, luego ella les conto otra y otra. Entonces todos sus amigos decidieron que los viernes en la tarde al terminar el horario laboral María cuento les contaría historias, cada una de las personas que la escuchaba se llenaban de alegría en sus sonrisas y aplausos manifestaban como las historias motivaba su vida.

Y desde ese momento Maria cuento fue una de las investigadoras mas reconocidas en el mundo,  porque por medio de las historias llenas de alegría empezó a  compartir sus estudios por todo los rincones del planeta